6 de marzo Día Europeo de la Logopedia
El 6 de marzo es el Día Europeo de la Logopedia por iniciativa del Comité Permanente de Logopedas de la Unión Europea, (2004) (www.cplol.eu). Aprovechando la efeméride hacemos algo de historia y alguna que otra reflexión
En España la primera titulación de Logopedia de carácter universitario data del año 1979 en la ciudad docente por excelencia, Salamanca
Mucho más tarde, otras universidades se sumaron a la oferta de estudios en logopedia. Fueron años en los que lentamente aumentaba el número de profesionales titulados. Paralelamente, cursos más o menos acertados, ofertaban la especialización y habilitaban a distintos profesionales para ejercer legalmente la actividad de logopedia.
A día de hoy, pienso que fue positivo que la profesión creciera a partir de profesionales de otras disciplinas pues la logopedia cuenta con una perspectiva marcadamente multidisciplinar, interdisciplinar y transdisciplinar. En el año 2012 el Consejo General de Colegios de Logopedas definió de forma suficientemente amplia la figura del Logopeda según se indica a continuación:
“El logopeda es el profesional de la salud que se dedica a la prevención, detección, promoción, educación, administración, evaluación, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación, habilitación, pronóstico, orientación, asesoramiento, docencia e investigación de las áreas de la comunicación humana y sus alteraciones,… proveedores de atención primaria para la comunicación y trastornos de las funciones orales no verbales (succión, masticación,…)” (CGCL, 2012).
Una definición de tal amplitud y complejidad se acota y determina según tres ejes diferenciados:
- ¿Cómo ejerce el logopeda?: como profesional de la salud;
- ¿Qué funciones lleva a cabo el logopeda?: prevención, detección, promoción, diagnóstico, tratamiento,…
- ¿Sobre qué capacidades humanas actúa el logopeda?: sobre la comunicación y sobre las funciones orales no verbales.
Resumiendo, y de forma genérica, la misión de la logopedia es aportar calidad de vida a los pacientes con trastornos de la comunicación y de la funciones orales no verbales.
Visibilidad en el calendario
Un día de fiesta para la logopedia como el de hoy ayuda a posicionarnos ante la población y sirve para recordar los principios que nos rigen. Por otra parte, permite a los profesionales aportar alguna reflexión para el momento actual.
En tal sentido quisiera exponer lo más simple posible dos planteamientos o niveles a considerar y con implicación en la actividad profesional:
- A nivel del usuario/paciente: tengo la impresión de que el paciente interesado en los servicios de logopedia frecuentemente llega al profesional desorientado, a veces con trayectorias insólitas y erráticas, y sin el conocimiento suficiente sobre lo que la logopedia le puede y debe aportar.
A mi modo de ver el consejo y criterio a seguir sería muy simple: el paciente ha de buscar la honestidad del profesional y la calidad en el servicio.
- Desde el punto de vista profesional: veo a la logopedia cada vez más alejada de aquella simpleza que viví hace años. Se decía: “tú eres logopeda,… pues entonces te dedicas a la ortofonía y a los movimientos de la lengua y los labios”.
No obstante, sería necesario creer en la mayoría de edad de la profesión y luchar a favor de una visión amplia y realista, asumir las responsabilidades expuestas en la definición indicada arriba. También luchar por una buena formación de los profesionales, mantener una perspectiva amplia que apoye su carácter transdisciplinar y la capacitación para trabajar junto a otras disciplinas en armonía, coordinados y sin miedo al “quién domina la partida”,…
Confiemos en que los colegios profesionales y las universidades estén en el camino correcto,…
Feliz Día Europeo de la Logopedia para todos los usuarios y profesionales.
