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¿Cuál es la mejor dieta para rebajar la hipertensión?

La hipertensión o tensión arterial elevada está detrás del 50% de las muertes producidas por patologías del corazón y accidentes cerebrovasculares. De hecho, casi el 43% de la población española la padece y de ahí nace la importancia de saber rebajarla y conocer cuáles son las pautas de vida a seguir para disfrutar de un cuerpo sano. La prevención es fundamental para evitar la aparición de enfermedades derivadas de la hipertensión arterial.

¿Qué alimentos nos ayudan a rebajar la hipertensión?

La Fundación Española del Corazón ha redactado un listado de alimentos cuyo consumo es muy recomendable para reducir la hipertensión y también prevenirla:

  • Carnes magras o de ave
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Frutos secos, en concreto nueces
  • Pescados
  • Semillas y legumbres
  • Yogur desnatado
  • Chocolate puro
  • Patatas
  • Remolacha
  • Soja
  • Espinacas
  • Ajo
  • Cereales integrales
  • Frutas como el limón, plátano, fresas, frambuesas y arándanos

Alimentos totalmente prohibidos para la hipertensión:

  • Dulces y bollería industrial
  • Mantequilla y margarina vegetal
  • Sal
  • Bebidas alcohólicas
  • Encurtidos y conservas
  • Alimentos fritos
  • Lácteos enteros
  • Embutidos y también el bacon
  • Carne roja

Otros consejos para mantener a raya la hipertensión

Además de poner mucho cuidado a la hora de seleccionar los alimentos que ingieren, las personas hipertensas deben incluir otros cambios en su vida diaria para volver a gozar de una buena salud y evitar la posible aparición de diferentes patologías relacionadas con la hipertensión arterial.

En concreto, se recomienda la práctica deportiva de manera regular ya que el ejercicio físico es muy eficaz para reducir la presión arterial. Unos 30 minutos de caminata diarios serán suficientes para lograr resultados visibles.

También es muy importante dejar a un lado el tabaco y descansar bien durante la noche. De esta forma alejamos la posibilidad de sufrir un accidente cardiovascular y rebajamos la hipertensión. Está demostrado que un sueño de mala calidad puede contribuir a elevar la hipertensión.

Aleja de tu vida el estrés: preocuparse por problemas que no se pueden controlar, exigirse a uno mismo demasiado, no tomarse un tiempo diario de relajación y exponerse a factores que provoquen ansiedad también son malos hábitos si queremos mantener una presión arterial adecuada.

El entorno debe ser el mejor apoyo del paciente

Para cualquier persona que esté atravesando un problema de salud, el apoyo de sus familiares y seres queridos es fundamental. Sus consejos pueden animar a la persona afectada por hipertensión a mejorar su modo de vida y a cuidar su alimentación, forma física y hábitos para evitar que la patología se agrave.

La buena compañía y una vida social activa pueden mejorar el estado de ánimo y con ello también la presión arterial. En cualquier caso, si se notan síntomas compatibles con cualquier problema de circulación o de tensión arterial lo mejor es pedir cita con el especialista que evaluará la situación de salud y, en los casos en que proceda, diseñará el mejor tratamiento.

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