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¿Cómo sé si necesito usar plantillas ortopédicas?

Cuándo debo usar plantillas

¿Cómo sé si necesito usar plantillas ortopédicas? Un porcentaje importante de la población mundial desarrolla una mala pisada y ni siquiera es consciente de ello. Esa forma incorrecta de pisar puede provocar ciertas molestias o incluso dolores, tanto en el propio pie como en el resto del tren inferior, e incluso, la cadera.

El uso de las plantillas ortopédicas, por tanto, es una gran opción para prevenir y compensar algunas patologías podológicas tales como pies planos, cavos o incluso esguinces.

¿Cómo sé si necesito usar plantillas ortopédicas?

El ejercicio más repetitivo que realizamos a lo largo del día es el de caminar. Si no llevamos a cabo ese movimiento de manera eficiente y con la postura adecuada del cuerpo, esa descompensación a la hora de apoyar cada pie puede derivar en molestias o dolores del tren inferior, con una gravedad que puede ir creciendo.

Si padeces cualquier molestia mientras paseas o al estar en reposo tras una buena caminata, puede ser síntoma de alguna patología podológica. En ese caso lo más aconsejable es acudir al especialista para que te realice un estudio de pisada y evalúe cuál es la situación concreta de tu forma de andar y de la planta de tus pies.

En el caso de que el especialista lo vea necesario porque tu pisada está descompensada, una de las herramientas más usadas son las plantillas ortopédicas que se han mostrado muy eficaces a la hora de prevenir lesiones severas y de curar ciertas patologías musculo-esqueléticas a nivel podológico.

¿Cómo funcionan las plantillas ortopédicas?

Las plantillas ortopédicas actúan sobre la pisada de la persona modificándola de manera biomecánica. En la actualidad están fabricadas en materiales tan diversos como látex, caucho, resina o polipropileno. Dependiendo de su composición aportan a la pisada una mayor estabilidad, resistencia y dureza.

Además, existen múltiples modelos que se adaptan al tipo de problema mecánico que se padezca en los pies y al uso que se le vaya a dar, dependiendo incluso del calzado al que se vaya a adaptar.

¿Qué síntomas me alertan de la necesidad de usar plantillas ortopédicas?

Las personas que sientan molestias en los pies, una mayor fatiga de la habitual tras realizar carrera continua o una simple caminata, dolor localizado en ciertas articulaciones o se percaten de que las suelas de su calzado se desgastan de una forma irregular, probablemente necesiten acudir al podólogo y sondear la posibilidad de usar plantillas ortopédicas.

¿Qué pasa si no uso plantillas ortopédicas?

Algunos de los efectos más graves que podemos padecer en el caso de que necesitemos plantillas ortopédicas para corregir nuestra pisada, y sin embargo, prescindamos de su uso, son:

  • Dolores continuos e incluso agravados, ya que los problemas podológicos relacionados con la pisada descompensada no desaparecen solos.
  • Lesiones a causa de sobrecargar ciertas áreas del pie que al no poder soportar más peso del que deberían pueden desencadenar ciertos daños a nivel traumatológico.
  • Cuerpo mal alineado a causa de una pisada descompensada que puede acarrear problemas en zonas claves como las rodillas, la columna vertebral, la cadera, etcétera…
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